Cómo resguardar los ahorros antes de las elecciones
El economista Daniel Garro, de Value International Group, explica qué está sucediendo en la economía argentina y cómo protegerse de la inestabilidad.
En Argentina, los meses previos a las elecciones, se alteran variables como el dólar y las tasas de interés. Este 2025, pese a que la economía venía relativamente tranquila, no es una excepción. Y los resultados desfavorables para el oficialismo en la provincia de Buenos Aires sólo complicaron el panorama.
En un contexto de inestabilidad y de la incertidumbre que siempre conllevan los comicios, Daniel Garro da algunas pistas para cuidar los ahorros.
“Históricamente, en Argentina, siempre previo a las elecciones, han pasado este tipo de cosas. Además, hay una fuerte volatilidad de tasas, con tendencia a la suba, producto del esquema monetario y financiero que está llevando a cabo el Gobierno desde hace bastante tiempo”, señaló.
Aprender a generar y clasificar excedentes
En cuanto a lo que pueden hacer las personas que tiene un cierto margen de ahorro para preservar su dinero en un contexto cambiante, indicó que lo primero es aprender a clasificar los excedentes.
Sumó que no se puede aplicar la misma estrategia para alguien que cobró el sueldo el día 30 y lo va a ir utilizando a lo largo del mes para hacer compras y pagos, que aquel que tiene la posibilidad de guardar ese dinero dos o tres meses, o que no necesita usarlo, salvo en caso de una emergencia.
“Todas las estrategias son diferentes. Por eso, lo importante es que, primero, la gente aprenda a generar excedentes y, después, a clasificarlos”, planteó. Sumó que “la gestión de la liquidez es un traje a medida, tanto para personas como para empresas”.
Y aclaró que esta gestión de la liquidez no sólo se refiere a los excedentes, sino a posibles faltantes de dinero, que también se deben planificar, para evitar recurrir al descubierto bancario cuando se necesita dinero.
Asesorarse y aprender
Una de las recomendaciones más frecuentes para quienes quieren salir de las opciones más tradicionales -dólar y plazo fijo- es buscar asesoramiento. Sin embargo, Garro advierte que el asesor también debe enseñar, porque, de lo contrario, esa persona hace un análisis sin tener en cuenta, muchas veces, la situación particular de la persona.
“Es muy importante que quien te asesore te enseñe. Tiene que cumplir las dos cosas: en el mismo acto te tiene que estar enseñando para que vos también participes en el proceso y no dejes el 100% de las decisiones al asesor”, advirtió.
Sumó que la mayoría utiliza el perfil de inversor, pero que no sirve, porque el esquema no se enfoca en la persona concreta que va a invertir, sino en una clasificación: si es conservador, intermedio o avanzado (que acepta un buen grado de riesgo).
Garro considera que la mayoría se ubica del lado de la oferta, cuando hay que situarse en el de la demanda. Precisó que un asesoramiento adecuado es individual. “Nosotros no analizamos solamente qué opciones de inversión hay, sino que primero vemos qué puede estar necesitando la persona o empresa, a partir de algo muy parecido a una mentoría”, indicó.
Qué otros factores tener en cuenta
Además de esto, el titular de Value International Group señaló que un factor a considerar, además del tiempo en que se va a necesitar el dinero, es si la persona está dispuesta a estar pendiente de su inversión todos los días o simplemente quiere colocar el importe y olvidarse.
Si, por ejemplo, alguien quiere colocar un monto por 90 días y desentenderse, detalló, una opción viable es un plazo fijo. En cambio, desaconsejó optar por una caución, porque este instrumento requiere estar atento, ya que hay a siete, catorce y treinta días, y se debe estar renovando.
Otra alternativa, indicó, es buscar una Lecap (Letras del Tesoro Nacional Capitalizables en Pesos) que tenga un plazo similar a un plazo fijo a 90 días y comparar los rendimientos. Pero volvió a la importancia de considerar cada caso en particular, porque explicó que, al hablar con la persona, puede manifestar que no le gustan los títulos estatales.
También hay que tener en cuenta si el inversor quiere que le depositen el dinero en una cuenta bancaria o prefiere otra opción, lo que limita las posibilidades. “Es un trabajo artesanal”, resaltó.
O, si, volviendo al ejemplo de los 90 días, tiene un vencimiento para el que necesita el dinero. Algunos, señaló Garro, no tienen problema en recibir el importe unos minutos antes de tener que realizar el pago, mientras otros prefieren recuperar lo invertido con unos días de antelación, para asegurarse de que no haya ningún tipo de inconveniente. “Y ahí te cambió la estrategia. Y resulta que los dos quieren lo mismo”, lanzó.