Exportaciones: por qué mejoraron y qué se espera
Según datos de ProMendoza las exportaciones crecieron en el primer cuatrimestre del año. Sin embargo, todavía persisten los signos de alerta. Cuáles son y a qué se deben. El producto estrella.
Quienes conocen bien la economía de Mendoza suelen repetir que cuando el tipo de cambio mejora, los productos locales tienen mejores chances. Las características de buena parte de la producción local es que elabora productos transables, es decir, que se pueden vender afuera. No solo en otros países sino también en otras provincias con foco principal en Buenos Aires. Por este motivo, también es cierto que cuando al país le va bien, a Mendoza le va mejor y la situación se repite en sentido contrario. En este marco, la provincia no está exenta de la fuerte recesión que ya comenzó a mostrar sus cifras de desempleo y de actividad por el piso. No obstante, existe una luz tenue que tiene que ver con las exportaciones.
Así, lo que no se puede vender en el mercado interno ha comenzado a irse al externo de la mano de un tipo de cambio más favorable, entre otros factores. Los últimos datos actualizados de la Fundación ProMendoza contabilizan los volúmenes y valores de todos los productos exportados entre enero y abril de 2024. La comparación de los cuatro meses acumulados se realiza de manera interanual, con igual periodo del 2023. En este marco, salvo algunas excepciones que no son menores, la mayoría de los productos registró una mejora en las cantidades vendidas. También se incrementó el valor FOB al que se exportó, lo que lleva un poco de aire fresco a algunos sectores.
Sin embargo, no todo es color de rosas ya que el vino todavía tiene números negativos y es el producto que mayor impacto tiene debido a que es el que más volumen posee. Del otro lado, este año se ha destacado el aceite de oliva como una suerte de producto estrella. Aunque es poco lo que se exporta en comparación y no alcanza a torcer el rumbo de los números totales, este producto se ha destacado fuerte en los primeros cuatro meses del año. Fernando Urdaniz, coordinador de Promoción Comercial de ProMendoza, destacó que el incremento en precios y en cantidades marcan un buen camino que se debe terminar de delinear a medida que avance el año.
Los clásicos y la estrella de hoy
Según los datos de ProMendoza, en el primer cuatrimestre de este año, las exportaciones de Productos Primarios (PP) crecieron 57% en valor FOB. Aquí, por volumen y crecimiento el ajo es el más importante ya que mejoró su valor un 73% y es el que mayor cantidad exporta en este rubro. La uva de mesa, la fruta de carozo y las cebollas también tuvieron un incremento fuerte en su precio internacional, pero el volumen es más bajo comparativamente. El ajo, que vende a Brasil más del 80% de lo que se cultiva, exportó 42% más en el primer cuatrimestre si se lo mide en cantidades. Hoy el sector está en una suerte de amarillo debido a que este año se vence un acuerdo antidumping que frena el ingreso del ajo chino a ese país y podría poner en jaque a los productores locales.
Con relación a los productos agroindustriales, catalogados como Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA), el crecimiento fue más moderado y en FOB fue de 4% entre enero y abril. En lo que a cantidades respecta, el incremento fue de 8%. El número que apenas rasguña el número positivo se explica por la fuerte caída que ha tenido el vino y que tira al resto de los números hacia abajo. Las exportaciones de uva cayeron 6% en volumen y 8% en valor. Debido a que la vitivinicultura se lleva casi el 40% del total de las exportaciones y el impacto en el total es fuerte. Es decir que aunque crezca el resto, la caída del vino determina el resto de las cifras.
“Preocupa la caída del vino ya que el consumo mundial no ha crecido”, destacó Urdaniz. Sin embargo, agregó que confían en que los números se acomoden sobre el final del semestre. De hecho, según las cifras del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), en abril y mayo las ventas de vino al exterior mostraron los primeros números positivos después de más de un año de bajas. “Es probable que se frene la caída”, expresó el especialista de ProMendoza. En este sentido, no esperan grandes crecimientos, pero sí algunas mejoras de la mano del tipo de cambio y de la paulatina normalización de las restricciones para girar divisas.
Las MOA se equilibraron gracias a la excelente performance lograda por el aceite de oliva. Es que según las estadísticas, entre enero y abril se exportó 64% más en cantidades y 139% más si se tiene en cuenta el valor. “Lo destacamos como producto porque tuvo un altísimo crecimiento”, observó Urdaniz. Mario Bustos Carra, presidente de la Cámara de Comercio Exterior de Cuyo, y también miembro de Asolmen (Asociación Olivícola de Mendoza) confirmó el dato. La mala cosecha que ha tenido España los dos últimos años ha impactado en una mayor demanda del aceite local, que podría haber sido mejor con una cosecha local más jugosa de la que hubo. “En todas las ferias nos pedían aceite de oliva y los productores locales han podido vender más a Brasil y a otros países de América Latina como México y Panamá”, destacó Urdaniz. La mayor demanda se debe a que el mayor proveedor mundial no ha podido abastecer sus mercados y eso impactó en precios. Pese a que la situación podría ser coyuntural, tanto el referente de ProMendoza como el de Asolmen apostaron por un crecimiento futuro en los mercados de exportación de aceite.
El futuro de las exportaciones
La mejora de las exportaciones se debe, en parte, a un tipo de cambio más favorable para exportar. Después de la devaluación de diciembre, el tipo de cambio mejoró un 200% y pese a que la inflación ha ido en alza, la diferencia no ha sido tan grande. La disparada del blue y el achique de la brecha cambiaria también facilitaron la posibilidad de exportar lo que, sumado a un intercambio más sencillo, incentiva al sector. Pese a que el cepo y las restricciones persisten, desde el sector privado estimaron que la situación se normalizará con el paso de los meses. Una urgencia, sin embargo, es la pronta actualización del tipo de cambio que corre el riesgo de volver a quedar rezagados.
Para Bustos Carra, además, es clave la sanción de la Ley Bases y el triunfo en el Senado marca un sendero político que otorga certidumbre más allá de la recesión actual. “Las expectativas en general son favorables porque la Ley Bases dará un respaldo político y social para llevar adelante las nuevas políticas. Eso se ha reflejado en los mercados nacionales e internacionales”, dijo Bustos Carra.
“La situación actual que puede ser favorable tiene el riesgo de quedar en nada si no se hace algo para aliviar los costos”, subrayó el representante de los exportadores. Es que la alta carga impositiva y logística atenta contra las posibilidades que ofrece el mundo y un tipo de cambio más competitivo. “El ajuste de diciembre ayudó, pero solo fue un paliativo”, agregó el empresario quien recordó que los exportadores arrastran meses de pérdidas y dificultades.
El mapa de las exportaciones
Qué productos mejoraron y cuáles están en riesgo.
M no está exenta de la fuerte recesión que ya comenzó a mostrar sus cifras de desempleo y de actividad por el piso. No obstante, existe una luz tenue que tiene que ver con las exportaciones. Así, lo que no se puede vender en el mercado interno ha comenzado a irse al externo de la mano de un tipo de cambio más favorable, entre otros factores. Los últimos datos actualizados de la Fundación ProMendoza contabilizan los volúmenes y valores de todos los productos exportados entre enero y abril de 2024.
La comparación de los cuatro meses acumulados se realiza de manera interanual, con igual periodo del 2023. En este marco, salvo algunas excepciones que no son menores, la mayoría de los productos registró una mejora en las cantidades vendidas. También se incrementó el valor FOB al que se exportó, lo que lleva un poco de aire fresco a algunos sectores. Sin embargo, no todo es color de rosas ya que el vino todavía tiene números negativos y es el producto que mayor impacto tiene debido a que es el que más volumen posee.

Los clásicos y la estrella de hoy
Qué pasó con el ajo y el vino y cuál es que se reveló este cuatrimestre-
Según los datos de ProMendoza, en el primer cuatrimestre de este año, las exportaciones de Productos Primarios (PP) crecieron 57% en valor FOB. Aquí, por volumen y crecimiento el ajo es el más importante ya que mejoró su valor un 73% y es el que mayor cantidad exporta en este rubro. Hoy el sector está en una suerte de amarillo debido a que este año se vence un acuerdo antidumping que frena el ingreso del ajo chino a ese país y podría poner en jaque a los productores locales. Con relación a los productos agroindustriales, catalogados como Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA), el crecimiento fue más moderado y en FOB fue de 4% entre enero y abril. En lo que a cantidades respecta, el incremento fue de 8%. El número que apenas rasguña el número positivo se explica por la fuerte caída que ha tenido el vino y que tira al resto de los números hacia abajo.
Las MOA se equilibraron gracias a la excelente performance lograda por el aceite de oliva. Es que según las estadísticas, entre enero y abril se exportó 64% más en cantidades y 139% más si se tiene en cuenta el valor. “Lo destacamos como producto porque tuvo un altísimo crecimiento”, observó Urdaniz. Mario Bustos Carra, presidente de la Cámara de Comercio Exterior de Cuyo, y también miembro de Asolmen (Asociación Olivícola de Mendoza) confirmó el dato. La mala cosecha que ha tenido España los dos últimos años ha impactado en una mayor demanda del aceite local, que podría haber sido mejor con una cosecha local más jugosa de la que hubo. “En todas las ferias nos pedían aceite de oliva y los productores locales han podido vender más a Brasil y a otros países de América Latina como México y Panamá”, destacó Urdaniz

Futuro esperanzador
Si el tipo de cambio sigue algo, las exportaciones tienen buen futuro.
La mejora de las exportaciones se debe, en parte, a un tipo de cambio más favorable para exportar. Después de la devaluación de diciembre, el tipo de cambio mejoró un 200% y pese a que la inflación ha ido en alza, la diferencia no ha sido tan grande. La disparada del blue y el achique de la brecha cambiaria también facilitaron la posibilidad de exportar lo que, sumado a un intercambio más sencillo, incentiva al sector. Pese a que el cepo y las restricciones persisten, desde el sector privado estimaron que la situación se normalizará con el paso de los meses. Una urgencia, sin embargo, es la pronta actualización del tipo de cambio que corre el riesgo de volver a quedar rezagados.
Para Bustos Carra, además, es clave la sanción de la Ley Bases y el triunfo en el Senado marca un sendero político que otorga certidumbre más allá de la recesión actual. “Las expectativas en general son favorables porque la Ley Bases dará un respaldo político y social para llevar adelante las nuevas políticas. Eso se ha reflejado en los mercados nacionales e internacionales”, dijo Bustos Carra.