Rubén David: “Si tenemos que traer productos importados es porque hemos hecho muy mal las cosas durante los últimos 60 o 70 años”
El gerente de uno de los mayoristas más importante de la provincia, dialogó con AENews y dio su visión sobre el consumo y los precios. Los riesgos de importar sin impuestos y la importancia de sostener la producción argentina para exportar.
Luego del anuncio rimbombante de la presidencia de Javier Milei de que facilitaría la importación de alimentos para favorecer la baja de precios, hubo distintas posturas por parte del sector privado. La que más se repite tiene que ver con la desigualdad de condiciones que hoy tienen los industriales para competir con compañías de otros países. Con el altísimo porcentaje de impuestos como variable principal a la que se suman otras como los mayores costos de producción. En este marco, Rubén David, gerente del mayorista Oscar David, contó lo que sucede en la actualidad -a un mes del aviso del aviso de facilitar el ingreso de productos extranjeros-. Por otra parte, el empresario dialogó con AENews sobre lo que sucede con los precios y cuáles son las perspectivas de desaceleración en ciernes con el dato fresco de la inflación de marzo que fue de 11%.
_¿Qué impacto en las góndolas ha tenido la facilitación de importaciones de alimentos?
_ El impacto de la liberación de importaciones todavía no se da porque no está liberado. Una cosa es lo que dice el Gobierno y otra es la realidad ya que no es tan sencillo importar desde Argentina. Con los antecedentes de cobro que tiene nuestro país, no vale con una simple promesa de pago sino que los proveedores piden pago anticipado antes de cargar el barco. No está liberada en forma total la importación y habrá que ver qué sucede en los próximos meses. Creo que tiene que estar resuelto el cepo cambiario y hasta que no suceda será difícil que se pueda importar como en Chile, donde lo hace cualquiera que esté en condiciones.
_En el caso de lo que se pueda importar, ¿qué producto podrían impactar en los precios en las góndolas?
_La verdad es que no es tanto una cuestión de productos sino de impuestos ya que en las condiciones actuales es muy difícil que estemos competitivos. Al respecto, opino lo de siempre y es que para un país productor como el nuestro -que posee materia prima y producción- traer productos importados es haber hecho las cosas muy mal durante los últimos 60 o 70 años. Deberíamos estar exportando, que es lo que hace cualquier país porque es de dónde va a obtener los dólares para importar. Se va a poder traer de afuera siempre que la exportación sea mayor, si no tenés que pedir plata en dólares al mundo para pagar las exportaciones, fondos que después no devolvés y se complica hacerlo.
_¿Podría haber un reacomodamiento de precios si la importación se concreta o se vuelve habitual?
_ El tema de los precios va más por una estabilidad del valor del dólar, de la economía, de los costos de la mano de obra y de una posible baja de impuestos. Eso va a ser más efectivo que cualquier medida aislada ya que si te hacen importar con el Impuesto PAIS va a ser difícil tener un buen precio y que algo de afuera te salga más barato que acá. Ahora, si al producto lo traés sin tributos, claramente va a ser más económico. Hay que tener en cuenta que en Argentina el componente impositivo es entre el 45% y 55%. Hay que darle la posibilidad al que produce acá de estar en las mismas condiciones.
_En este marco, ¿qué opina sobre la posibilidad de hacer competir a la industria local con la extranjera?
_Además de lo que mencionamos de los impuestos, hay que tener en cuenta que afuera –entre otras cosas- hay crédito para producir, financiamiento accesible ya que los gobiernos incentivan la exportación, no la importación. Acá el tema es que si vamos a estar todos en igualdad, puede ser positivo importar lo que no producimos. Es el caso de Chile que no fabrica autos porque no es competitivo, pero tiene un acuerdo para traerlos a tasa cero. Lo hace para que al consumidor le salga barato y con los dólares que generan las exportaciones del cobre y de la minería.
Entonces, hay que reconfigurar todo ya que ni este Gobierno ni el anterior ni el anterior… van a hacer algo mágico con una sola medida salvadora. Si no armás un plan estratégico con todo incluido a largo plazo, no hay forma de salir adelante. No podemos esperar que una persona solucione todo, es imposible porque hay que pensar en el largo plazo que es lo que hacen los países con modelos a seguir. Lo hace Uruguay, Paraguay y Chile que pueden cambiar de presidente y continúan con un rumbo fijado.
_La inflación de marzo se ha morigerado, ¿cómo se han comportado los precios en el retail?
_ Han bajado muchos productos. Creo que estamos tocando el piso en el precio de los productos que se habían disparado en diciembre por las altas expectativas inflacionarias que no se han cumplido. Por caso, el azúcar valía $1.400 en diciembre y hoy está en menos de $900. Hay que tener en cuenta que quien forma precios siempre ve el costo de reposición porque en épocas inflacionarias no podés vender con precios de costos antiguos. Al evaluar en diciembre el valor de reponer se consideró que el mismo presidente Milei, las consultoras y el ministro de Economía, Luis Caputo, hablaron de una inflación del 50% y eso finalmente no se cumplió.
_¿Cuál sería el piso de esta desaceleración de precios?
Esta relativa estabilidad en la que estamos hace un par de meses hace que muchos productos están en baja. ¿Hasta dónde? Hasta que lleguen a su costo de producción y de ahí no van a poder bajar más porque han subido los sueldos, los impuestos, las tarifas de servicios públicos, el transporte y los costos indirectos. Lo que se desinfla ahora es el extra que se puso por la incertidumbre y las expectativas de más inflación y un dólar mucho más alto, pero creo que están tocando un piso y se van a acomodar en función de los costos.
Las empresas vender por debajo de esos costos porque pueden tener problemas financieros y ese es un riesgo de muchas ya que por no perder ventas, pueden dejar de ser sustentables. Te lo digo porque a nosotros los costos fijos nos han aumentado mucho y la mayoría son en dólares. Se no lo regulás bien y el producto importado es más barato porque en otros países se fabrica con menores costos e impuestos, la producción corre riesgo. Creo que el Estado debe tener cuidado de hasta dónde sí y hasta dónde no importar.
_¿Qué esperan de este Gobierno nacional?
_Soy optimista. Tengo esperanza como siempre la tuve, lo mismo que con el Gobierno anterior y con el anterior. Si no, no estaría haciendo nada. Si pensara que Agentina se fuera a destruir no haría nada. Siempre que sube un gobierno lo recibo con esperanza tratando de ayudar en lo que me toca y en lo que pueda decidir, porque muchas cosas no están en mis manos ni nadie nos pide opinión. Miramos nuestra actividad, a nuestros clientes con el fin de brindarles un buen servicio a nuestro cliente esté quien esté y adaptarnos lo más rápido posible a las situaciones.
No me interesa mucho quién es el que gobierna, si es peronista, radical o libertario. Me importa que vean cómo funciona el mundo, lo que necesita la Argentina. Ojala que algún día se junten todos y escribamos hacia dónde queremos ir y no importa de qué color es el partido que Gobierna sino la meta. Cuando decidamos adónde queremos ir, van a venir muchas inversiones porque la Argentina va a tener seguridad jurídica, seguridad laboral, seguridad para importar y exportar. Esto hasta que no esté resuelto va a ser difícil que vengan capitales a invertir. Entonces desde adentro, los empresarios y todos vamos a tener que empezar a empujar para apoyar, para hacer cosas y no perder fuentes de trabajo ni actividad. Para esto necesitamos el acuerdo de todos: el gobierno, los empresarios, los consumidores, los sindicatos. Todos hacia un mismo lugar.
Importaciones: lo que se dice y lo que pasa
El empresario mendocino Rubén David clarificó lo que sucede en la actualidad con las importaciones de alimentos.
Rubén David, gerente del mayorista Oscar David, contó lo que sucede en la actualidad -a un mes del aviso del aviso de facilitar el ingreso de productos extranjeros-. Por otra parte, el empresario dialogó con AENews sobre lo que sucede con los precios y cuáles son las perspectivas de desaceleración en ciernes con el dato fresco de la inflación de marzo que fue de 11%.
_¿Qué impacto en las góndolas ha tenido la facilitación de importaciones de alimentos?
_ El impacto de la liberación de importaciones todavía no se da porque no está liberado. Una cosa es lo que dice el Gobierno y otra es la realidad ya que no es tan sencillo importar desde Argentina. Con los antecedentes de cobro que tiene nuestro país, no vale con una simple promesa de pago sino que los proveedores piden pago anticipado antes de cargar el barco. No está liberada en forma total la importación y habrá que ver qué sucede en los próximos meses. Creo que tiene que estar resuelto el cepo cambiario y hasta que no suceda será difícil que se pueda importar como en Chile, donde lo hace cualquiera que esté en condiciones.
“Si tenemos que importar, es porque hemos hecho muy mal las cosas”
El empresario Rubén David habló la competencia desleal y la necesidad de incentivar las exportaciones.
_En el caso de lo que se pueda importar, ¿qué producto podrían impactar en los precios en las góndolas?
_La verdad es que no es tanto una cuestión de productos sino de impuestos ya que en las condiciones actuales es muy difícil que estemos competitivos. Al respecto, opino lo de siempre y es que para un país productor como el nuestro -que posee materia prima y producción- traer productos importados es haber hecho las cosas muy mal durante los últimos 60 o 70 años. Deberíamos estar exportando, que es lo que hace cualquier país porque es de dónde va a obtener los dólares para importar. Se va a poder traer de afuera siempre que la exportación sea mayor, si no tenés que pedir plata en dólares al mundo para pagar las exportaciones, fondos que después no devolvés y se complica hacerlo.
_ El tema de los precios va más por una estabilidad del valor del dólar, de la economía, de los costos de la mano de obra y de una posible baja de impuestos. Eso va a ser más efectivo que cualquier medida aislada ya que si te hacen importar con el Impuesto PAIS va a ser difícil tener un buen precio y que algo de afuera te salga más barato que acá. Ahora, si al producto lo traés sin tributos, claramente va a ser más económico. Hay que tener en cuenta que en Argentina el componente impositivo es entre el 45% y 55%. Hay que darle la posibilidad al que produce acá de estar en las mismas condiciones.

El piso de la desaceleración de precios
Las góndolas han morigerado sus aumentos, pero la baja no podrá exceder los altos costos de producción.
La relativa estabilidad en la que estamos hace un par de meses hace que muchos productos están en baja. ¿Hasta dónde? Hasta que lleguen a su costo de producción y de ahí no van a poder bajar más porque han subido los sueldos, los impuestos, las tarifas de servicios públicos, el transporte y los costos indirectos. Lo que se desinfla ahora es el extra que se puso por la incertidumbre y las expectativas de más inflación y un dólar mucho más alto, pero creo que están tocando un piso y se van a acomodar en función de los costos.
Las empresas vender por debajo de esos costos porque pueden tener problemas financieros y ese es un riesgo de muchas ya que por no perder ventas, pueden dejar de ser sustentables. Te lo digo porque a nosotros los costos fijos nos han aumentado mucho y la mayoría son en dólares. Se no lo regulás bien y el producto importado es más barato porque en otros países se fabrica con menores costos e impuestos, la producción corre riesgo. Creo que el Estado debe tener cuidado de hasta dónde sí y hasta dónde no importar.